Panorama de la mujer en tu balcón
Para Diego
Ella contempla la paraselene de hoy
y arroja las plumas de tu almohada
telarañas blancas tejen el viento de su noche
fue el día siguiente
y las niñas saldrán a la calle
a jugar con la nieve
esculturas de brizne y ángeles en el concreto
otra ciudad esculpida por sus manos
algunas harán alas y se arrojarán a las alcantarillas
para compartir el milagro con las ratas
triste como un cristal empañado
en tu balcón ella ofrece una sonrisa
nadie mira
ayer pensaban las niñas
en una estatua repleta de telarañas
y se preguntaban si la viuda negra
habita aún la boca o el pecho
sin plumas en la almohada
sin insectos en la voz
la mujer se pone a cantar
y cierra la ventana en silencio y para siempre
después sueña con la viuda
devorando las bocas y los pechos
de las niñas que jugaban en la seda
la araña que enreda entre sus patas
la frágil arquitectura de una ciudad
—porque a estas ciudades de los ángeles
siempre las derriba la brisa de los sueños—
cuando un extraño sueña con una mujer
que se arroja desde el balcón
con tu almohada entre sus brazos
Algunas amigas y amigos me pidieron que compartiera el poema rechazado. El que debería ser un cuento. Aquí está. Ha cambiado bastante en dos años.
Está dedicado a Diego Ordaz. Una vez dijo que le gustaba mucho.
Johnny Carteras
Un comentario en “El poema que no era poema”